World Mission Sunday is celebrated on the second to last Sunday of October. This year it is marked on October 20th.
In his message, on this year’s theme ‘Go and invite everyone to the banquet (cf. Mt 22:9)’, Pope Francis reminds us that we are each called “to take part in this universal mission by offering his or her own witness to the Gospel in every context, so that the whole Church can continually go forth with her Lord and Master to the “crossroads” of today’s world.”
Sr Rosemary who is the Diocesan Director for the Pontifical Mission Societies in Newfoundland reports on her attendance at the recent Pontifical Missions Conference and AGM
“Last month I attended the Pontifical Missions Conference and AGM which was held at Queen of Apostles Renewal Centre in Mississauga from Sept 9-12, 2024. At the conference we welcomed our new National Director Bishop John Boissoneau and bid farewell to Father Alex Osie, C.S.Sp who has held that position for the past 12 years.
On October 20, 2024, Catholics all over the world will celebrate World Mission Sunday. On that day we are asked to pray and give financial support to continue the missionary work of the Church which is evangelization. As the Diocesan Director for the Pontifical Mission Societies, I ask you to be cognizant of this request and to pray and give to the collection if you are able. Money is always needed to carry out the various projects in missionary countries and it was noted that last year’s collection was down by 35%.
Your gift of prayer and financial assistance on World Mission Sunday helps the Church in the missions in Africa, Asia, Northern Canada, the Pacific Islands and Latin America. It assists people in remote villages, towns and cities through the witness and work of missionaries and helps construct meeting places such as chapels and classrooms for liturgies, workshops and teaching.
The emphasis from Bishop Boissoneau and Father Alex’s talks during the conference was on prayer for the missions and returning to the roots of our charism whose origins were based on prayer and that our Church exists for evangelization. All at the conference were very pleased to know we have started the Living Rosary Apostolate in the Basilica Parish and have a total of 40 parishioners participating presently reciting one assigned decade daily. The 20 decades of the Rosary are said twice a day with our first intention being for the missions and then our own intentions. If you would like to know more about the Living Rosary Apostolate and be part of it feel free to contact me by email at rosemaryryan1943@gmail.com.
My main work for the Pontifical Mission Society is to remind Parish Priests in the Archdiocese of the importance of World Mission Sunday, provide them with blurbs for their bulletins for each Sunday in October, offer to speak to any parish groups or at liturgies, distribute coin boxes when requested and attend the yearly conference and AGM. My years in Peru and the similar work our sisters do in that country provide a great experience for me to bring to this ministry.”
La Jornada Mundial de las Misiones se celebra el penúltimo domingo de octubre. Este año se celebra el 20 de octubre.
En su mensaje, sobre el tema de este año «Id e invitad a todos al banquete (cf. Mt 22,9)», el Papa Francisco nos recuerda que cada uno de nosotros está llamado «a participar en esta misión universal ofreciendo su propio testimonio del Evangelio en cada contexto, para que toda la Iglesia pueda salir continuamente con su Señor y Maestro a las “encrucijadas” del mundo de hoy.»
La Hna. Rosemary, Directora Diocesana de las Obras Misionales Pontificias en Terranova, nos informa sobre su asistencia a la reciente Conferencia y Asamblea General de las Misiones Pontificias.
«El mes pasado asistí a la Conferencia Pontificia de Misiones y a la Asamblea General que se celebró en el Centro de Renovación Reina de los Apóstoles en Mississauga del 9 al 12 de septiembre de 2024. En la conferencia dimos la bienvenida a nuestro nuevo Director Nacional, el Obispo John Boissoneau, y despedimos al Padre Alex Osie, C.S.Sp, que ha ocupado ese cargo durante los últimos 12 años.
El 20 de octubre de 2024, los católicos de todo el mundo celebrarán la Jornada Mundial de las Misiones. Ese día se nos pide rezar y dar apoyo financiero para continuar la labor misionera de la Iglesia que es la evangelización. Como Director Diocesano de las Obras Misionales Pontificias, les pido que sean conscientes de esta petición y que recen y den para la colecta si pueden. Siempre se necesita dinero para llevar a cabo los diversos proyectos en los países misioneros y se ha observado que la colecta del año pasado disminuyó un 35%.
Su donativo de oración y ayuda económica en la Jornada Misionera Mundial ayuda a la Iglesia en las misiones de África, Asia, Norte de Canadá, Islas del Pacífico y América Latina. Ayuda a la gente de aldeas, pueblos y ciudades remotas a través del testimonio y el trabajo de los misioneros y contribuye a la construcción de lugares de encuentro como capillas y aulas para liturgias, talleres y enseñanza.
Las intervenciones del obispo Boissoneau y del padre Alex durante la conferencia hicieron hincapié en la oración por las misiones y en volver a las raíces de nuestro carisma, cuyos orígenes se basan en la oración y en que nuestra Iglesia existe para evangelizar. Todos los asistentes a la conferencia se alegraron mucho de saber que hemos comenzado el Apostolado del Rosario Viviente en la Parroquia de la Basílica y que un total de 40 feligreses participan actualmente rezando una decena asignada diariamente. Las 20 decenas del Rosario se rezan dos veces al día con nuestra primera intención por las misiones y luego nuestras propias intenciones. Si desea saber más sobre el Apostolado del Rosario Viviente y formar parte de él, no dude en ponerse en contacto conmigo por correo electrónico en rosemaryryan1943@gmail.com.
Mi trabajo principal para la Sociedad Misionera Pontificia es recordar a los párrocos de la archidiócesis la importancia de la Jornada Misionera Mundial, proporcionarles folletos para sus boletines de cada domingo de octubre, ofrecerme para hablar a cualquier grupo parroquial o en liturgias, distribuir alcancías cuando me lo pidan y asistir a la conferencia anual y a la asamblea general. Mis años en Perú y el trabajo similar que nuestras hermanas hacen en ese país me proporcionan una gran experiencia para aportar a este ministerio.»