Christmas is a time to rejoice in the good news that God has become incarnate – in each one of us – human and other-than-human!
On this Christmas day, we are reminded that, just as our creating and sustaining God makes peace through justice and right relationships, so, too, we are expected to be bearers of the good news, makers of peace, bringers of justice, living embodiment of right relationships…
The Jesuit Philip Chircop has these wise words for us as we sing incarnation into birth: “In the coming days, simmering and basking in Christmas joy, try to intentionally walk softly … talk quietly … kneel reverently … rise eagerly … Spend some time reflecting on the radical beauty of these simple words: Walk … Talk … Kneel … Rise … Softly … Quietly … Reverently … Eagerly.”
Happy Christmas!
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La Navidad es un tiempo para alegrarse de la buena noticia de que Dios se ha encarnado en cada uno de nosotros, humanos y no humanos.
En este día de Navidad, se nos recuerda que, al igual que nuestro Dios creador y sustentador hace la paz mediante la justicia y las relaciones justas, también se espera de nosotros que seamos portadores de la buena nueva, artífices de paz, portadores de justicia, encarnación viva de las relaciones justas….
El jesuita Philip Chircop tiene estas sabias palabras para nosotros mientras cantamos la encarnación en el nacimiento: “En los próximos días, hirviendo a fuego lento y disfrutando de la alegría de la Navidad, intentemos intencionadamente caminar suavemente… hablar en voz baja… arrodillarnos reverentemente… levantarnos ansiosamente… Dediquemos algún tiempo a reflexionar sobre la belleza radical de estas sencillas palabras: Camina … Habla … Arrodíllate … Levántate … Suavemente … Tranquilamente … Reverentemente … Ansiosamente”.
¡Feliz Navidad!
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